Por Ernesto Acosta
Saltillo, Coah., 7 de noviembre de 2015- El PVEM propone reformar la Ley General de Salud para establecer en el Artículo 324 que toda persona mayor de edad con capacidad jurídica, a quien se le haya diagnosticado la muerte, se presumirá donante de órganos, tejidos y células con fines terapéuticos, salvo que existiese una manifestación de voluntad en contrario.
Además, se agregaría que la expresión afirmativa o negativa puede ser revocada en cualquier momento por el manifestante, pero no puede ser revocada por persona alguna después de su muerte, explicó el diputado federal por Coahuila José Refugio Sandoval Rodríguez.
Por ahora, el 324 indica que habrá consentimiento tácito del donante cuando no haya manifestado su negativa a que su cuerpo o componentes sean utilizados para trasplantes, siempre y cuando se obtenga también el consentimiento sea del cónyuge, el concubinario, la concubina, los descendientes, los ascendientes, los hermanos, el adoptado o el adoptante.
Asimismo, en el 327 se precisaría que los gastos en que se incurra con motivo de la extracción del órgano que se dona o que se entrega en donación, forman parte de los gastos propios del trasplante y serán imputables al sistema de salud receptor.
La iniciativa, presentada en la Cámara Baja, se basa en el “consentimiento presunto”, para extraer partes del cuerpo para fines de trasplante, a menos que la persona haya manifestado su oposición antes de fallecer y conste por escrito.
“Y es que la tasa anual de donantes en nuestro país es de solo 3.6% por cada millón de habitantes, muy por debajo de Brasil, Colombia y Venezuela, lo cual significa que la donación de órganos es casi nula, a pesar que un solo individuo puede beneficiar a más de 8 personas”.
En nuestro país, casi 20 mil personas esperan trasplante de órgano o tejido, reporta el Centro Nacional de Trasplantes: 11 mil requieren riñón, más de 7 mil córneas y el resto hígado, riñón y páncreas, entre otros.
En España y Venezuela:
Las leyes establecen que quien fallece debe donar sus órganos a menos que haya dejado documentos que estipulen lo contrario.